¿Cómo identificar las revistas llamadas depredadoras (predatory journals, pseudo-journals u otras denominaciones)?, es decir, aquellas que solicitan manuscritos y los admiten para publicar en acceso abierto, previo cobro de las tasas de publicación o Article Processing Charges (APC).
Además de listas enumerativas, que suscitan ciertas controversias, hay que tener en cuenta otros mecanismos a la hora de identificar las publicaciones más idóneas para un investigador, a continuación se citan algunas pautas de ayuda.
Por revistas depredadoras se entiende aquellas que solicitan manuscritos por los que cobran sin proporcionar los servicios editoriales y procedimientos de calidad que constituyen las principales señas de identidad de las publicaciones científicas:
- No tienen revisión por pares
- Los tiempos de publicación son muy cortos
- Contienen gran cantidad de artículos anuales
- El pago de tasas se realiza por parte del autor
- A menudo usan títulos con términos parecidos a los de revistas prestigiosas
El fraude no está en que cobren a los autores, ya que este modelo es el aceptado para publicar en acceso abierto, sino en que no realizan evaluación científica; publican todo sin revisión ni corrección previa, su finalidad no es la difusión del conocimiento científico sino practicar un modelo de negocio abusivo y fraudulento.
Otros indicios de fraude serían:
- Suelen contactar directamente con los autores por correo electrónico.
- El sitio web de la revista suele ser de poca calidad: gramática, estructura de las oraciones, frases descriptivas; los enlaces no funionan; continen una cantidad absurda de anuncios; una verdadera dificultad si no imposibilidad de encontrar un archivo con números anteriores; imágenes difusas… cada vez son capaces de imitar mejor el diseño visual de los sitios de las verdaderas revistas académicas.
- Mencionan índices de impacto o repertorios de revistas, de los que supuestamente forman parte, pero que no corresponden con las manejadas habitualmente por los académicos o las agencias de evaluación. Estos índices no enlazan con la fuente original
- Aseguran formar parte de sociedades científicas reales o imaginarias, se puede verificar visitando los sitios oficiales de tales entidades.
- No proporcionan información sobre su cuerpo editorial, ni páginas con instrucciones para autores/as, etc.
- En ocasiones ocultan la información sobre los APC (Article Processing Charge).
- Se dirigen a los investigadores a través de mailings masivos tipo spam.
- Usan inadecuada o fraudulentamente el ISSN.
Para detectar una posible revista depredadora, se debe comprobar que la revista se indexe en alguna base de datos de reputación reconocida como MedLine, Embase, Web of Science: Master Journal List, o Scopus Sources, estas bases de datos utilizan criterios exigentes de calidad para indizar revistas.
Otros repertorios de uso habitual en el mundo académico serían:
- MIAR (Matriz de Información para el Análisis de Revistas),
- DOAJ (Directory of Open Access Journals): directorio independiente que indexa y proporciona acceso a revistas de alta calidad, de acceso abierto y revisadas por pares.
- Dialnet,
- ERIH Plus (European Reference Index for the Humanities and the Social Sciences), etc.
Si aparece incluida en ellos, eso quiere decir que la revista está sometida a un control externo que permite acreditar su calidad científica.
A continuación se citan otros recursos muy interesantes de evaluación de revistas y editores:
Iniciativa conjunta de varias instituciones que ha establecido una lista de preguntas que todo investigador debe hacerse antes de enviar su manuscrito a cualquier revista. A más respuestas afirmativas, más seguro es enviar el manuscrito
Principios de transparencia y buenas prácticas en la publicación científica de COPE, DOAJ, OASPA y WAME.
También debemos tomar en consideración los criterios mínimos que debe tener un medio de difusión de la investigación para que las publicaciones que en él se incluyan puedan ser consideradas en la evaluación de la actividad investigadora tal y como están descritos en el Apéndice de la Resolución de 5 de diciembre de 2023 , de la Comisión Nacional Evaluadora de la Actividad investigadora, (pág. 24)